Carta de despedida a mis pacientes, con motivo de mi jubilación.

A todos mis pacientes del Consultorio de Mera 

( Ortigueira ) 

31 de Octubre de 2019 

No soy una persona de despedidas, y estos momentos se me van a hacer muy difíciles, por eso tomé la decisión de comunicaros mi jubilación por carta. Soy menos duro de lo que pudiera parecer.
En los últimos meses algunos me preguntasteis cuando me jubilaba, os decía que dentro de un año. No os conté la verdad. Os pido disculpas. 

La incertidumbre en el futuro de las pensiones me llevó a tomar la decisión de jubilarme a los 64 años, ya que estando en quiebra técnica el sistema de pensiones (este año hubo que pedir un préstamo de 18.000.000.000 de euros para pagar las dos pagas extra a los pensionistas) nadie me asegura, que en poco tiempo, tras reformar el método de cálculo,  las pensiones no vayan a ser de un importe inferior a la que me corresponde en este momento, después de 40 años cotizados. 

Hace  27 años, 6 meses, 25 días y más de 500.000 Km.,  llegué aquí,  dejando la plaza  que tenía en el  Hospital  Arquitecto Marcide de Ferrol. Quería marchar del hospital y venir a un centro de salud, y en ese traslado la plaza más cercana que tenía era en el Consultorio de Mera, a 34 Km. de casa, algo que en aquel momento me parecía que estaba muy lejos, pero no lo consideré un problema, ya que mi intención era estar poco  tiempo en Mera, para pedir traslado lo antes que pudiera a otro centro de salud por la zona de Ferrol, cerca de mi casa.
Fue pasando el tiempo, me fui sintiendo muy cómodo en Mera y llegó un momento en que ya me fue muy difícil tomar la decisión de marchar, y vosotros fuisteis  los culpables de que esto fuera así. Me sentía  querido, valorado y respetado. Ya me sentía más de Mera y de esta comarca maravillosa, que de Neda, el lugar donde nací y vivo. Llegó un momento, ya hace años, que tomé la decisión de que mi vida profesional terminara aquí, entre vosotros. 

Mi despedida es como profesional, pero no como vecino y amigo. Creo que después de tantos años me gané el derecho a ser un vecino más de  Mera, Mera de arriba, San Adrián, San Claudio, Feás, Landoi y Sismundi, las parroquias de Ortigueira y Cariño, donde en mayor o menor número  tuve pacientes y tengo amigos.

 También me siento muy cercano al resto de vecinos del Ayuntamiento de Ortigueira después de realizar durante estos 27 años más de 1.000 guardias en el PAC  (Urgencias) del Centro de Salud.

Cuando llegué a Mera teníamos 1200 pacientes y el Ayuntamiento de Ortigueira 10.000 habitantes, hoy  tenemos menos de 600 pacientes y Ortigueira poco más de 5000 habitantes. Puedo recordar, si voy mentalmente  casa por casa, a los más de 500 vecinos, pacientes y amigos que nos dejaron en estos 27 años, y lo hago con mucha tristeza, no solo por el afecto personal a cada uno de ellos, sino al ver como cada vez somos menos y estamos sumidos en un proceso irreversible de desaparición, aquí y en todo el medio rural de Galicia y resto de España. Debido al tremendo descenso de población que habrá en no muchos años,  muy probablemente, dentro de procesos de reestructuración para reducir gastos, en una sanidad ya exhausta en estos momentos, el Consultorio de Mera sea cerrado, como otros muchos en todo el rural de Galicia. Sé que muchos de vosotros sois conscientes de todo esto, ya que  lo hemos hablado en muchas  ocasiones 

Me voy tranquilo, sabiendo que quedáis, de momento, en manos de la Dra. Analía Rey Mateo, una gran profesional. Desconozco en estos momentos quien será la enfermera  que me sustituya, provisional o definitivamente, pero estoy seguro que estaréis perfectamente atendidos.  

Permitidme que agradezca desde aquí el buen trato y el respeto que recibí siempre de todos los médicos con los que trabajé en el Consultorio de Mera, también a los de los Centros de Salud de Ortigueira,  Espasante, O Barqueiro y los del PAC (Urgencias). Lo mismo tengo que decir de mis  compañeros de enfermería de Ortigueira, Espasante, O Barqueiro  y del PAC, de odontólogos, fisioterapeutas, matronas, farmacéuticas, auxiliares de enfermería y odontología, personal administrativo, celadores, personal de limpieza y personal de las ambulancias del 061. Gracias también a todo el personal que hubo en todos estos años en la Farmacia de Mera. No miento si digo, que jamás tuve un problema importante con ninguno de todos los compañeros mencionados, y eso es una gran satisfacción en mi despedida. También recordaré siempre los buenos momentos en Marisol (Casa Andrea), donde compartí con muchos de vosotros conversación y café en los fríos días de invierno, recibiendo siempre muestras de cariño y respeto.

Agradecimiento a mi empresa, por haber sido el sustento de mi familia durante 38 años. Gracias a todos los miembros de las distintas direcciones del Área sanitaria de Ferrol, que siempre me trataron con respeto y valoraron adecuadamente mi compromiso con la empresa. Gracias también al personal de Recursos Humanos, Suministros, Informáticos, etc…, de los que también recibí siempre un trato excelente.
Gracias  a todos los alcaldes, concejales , personal técnico y personal de mantenimiento del Ayuntamiento de Ortigueira, con los que tuve relación durante estos años, sobre todo durante los trabajos de puesta en marcha y apertura del nuevo Consultorio de Mera.  

Perdonadme si en algún momento tuve un mal día y no cumplí como debiera con mi deber profesional. 

Traté siempre de cumplir con mi trabajo de la mejor manera posible y puedo decir con orgullo que en  40 años de profesión, 27 de ellos en Mera, quitando las vacaciones y permisos reglamentarios, solamente falté 7 días a trabajar por encontrarme enfermo (un corte en un dedo con un lampo y una gripe que me tumbó).
 

Nada hice de más, solamente cumplí con mi deber. No merezco ningún homenaje ni tampoco lo deseo. Vosotros, vuestro respeto y vuestro cariño, sois el mejor homenaje que se puede recibir.
 

No voy a cambiar de vida, pero sí de ritmo de vida. Sé que me va a costar, pero trataré de acostumbrarme.
Como dije antes, esta es solo una despedida profesional. Dejaré de ser el enfermero de Mera, pero seguiré siendo un vecino más de Mera y de todas las parroquias que antes mencioné. Seguiré siendo amigo de todos  vosotros, y estoy seguro de que  nunca me  faltará en vuestra casa un platiño de caldo y una mesa donde conversar. 
Os llevaré siempre en mi corazón. Muchísimas gracias por todo y que Dios os bendiga. 

 Abel García López   , O Practicante de Mera 

P.D.: Dedico este momento tan emocionante y tan especial para mí, a Mamen, la Santa, mi esposa, por sus cuidados y apoyo durante estos años y que ahora  tendrá que aguantarme  en casa todo el día, a Brianda y Josué, mis hijos, a Cris, mi nuera, a Abel mi padre y a mis hermanas Pili e Isa,  y a mi único heredero, de momento, mi nieto Pablo, el más guapo de la familia. También  quiero tener un recuerdo muy especial  para dos mujeres excepcionales, únicas e irrepetibles, ya fallecidas, Pilarita mi madre, y Teresa mi suegra. Bendita sea la memoria de las dos. Z”L. 

Desde el  6 de  Abril de  1992  al 31  de  Octubre de  2019

Más de  27  años con vosotros, pero llegó ya la hora de mi jubilación.

Seguid comportándoos con sentidiño como usuarios de una sanidad pública de las mejores del mundo, pero carísima, no gratuita como a veces decimos, imitando el lenguaje perverso de muchos políticos irresponsables.   

Todos podemos y debemos colaborar para aminorar el gasto sanitario, ya que va a llegar el momento en que ese gasto sea inasumible y añoraremos lo que ahora tenemos. 

CUIDAD EL CONSULTORIO DE MERA EN MI AUSENCIA.

Permitidme que llegado este momento os pida algo que me preocupa. Defended a España, nuestra gran nación, y sed firmes y beligerantes con aquellos que quieren romper su sagrada unidad. Nuestros hijos y nietos se merecen una España unida y próspera.

OS LLEVO EN EL CORAZÓN Y OS ECHARÉ MUCHO DE MENOS.

Un fuerte abrazo de ABEL, o Practicante de Mera